Una tasa de café compartida con los amigos adquiere contenido ideológico la mayoría de las veces, pero en otras inspira pensar en circunstancias cotidianas a las que no les encontramos respuesta.
Sin darnos cuenta, los alegres gritos de los niños fueron reemplazados por ladridos de perros en los parques y en todos los lugares.
La gente está gastando más en educar y humanizar las mascotas que en atender otras necesidades básicas de sus propias familias. Argumentan que es más barato criar perros que niños.
Las mascotas invadieron los parques recreativos de Bogotá. Sus dueños, que recogen los detritos sólidos, no consideran, sin embargo, que en donde orinan los perros juegan los niños y sus padres
Eso es lo de menos, lo molesto es no poder caminar o trotar en los parques por el jugueteo de perros de todos los tamaños y colores, algunos agresivos y sin bosales, que invaden los espacios recreativos que fueron creados para la gente.
Niños y niñas con sus risas, gritos y llantos están siendo erradicados de estos espacios porque los dueños de los perros, que ahora se dicen «papás» de ellos, aunque el hombre no engendra perros, consideran que los parques son para sus «hijos», ni siquiera se consideran ellos mismos merecedores de tales lugares.
También inquieta por ejemplo, los cambios de la televisión cuyo acceso es cada vez más costoso y engañoso sobre la programación de eventos.
Hace unos años la televisión abierta, la que llega por las antenas comunes instaladas en los techos de casas y edificios, se sostenía económicamente con la pauta publicitaria que reducía sustancialmente el tiempo de los programas, noticieros, telenovelas etc.
Lo único que le costaba a los televidentes era comprar el televisor.
Apareció luego la televisión por cable o suscripción y se le dijo a los potenciales clientes que sería la alternativa sin comerciales y escasas «promociones» de los contenidos próximos de cada canal.
Directv confunde el golf con una prueba de automovilismo de la Fórmula 1.
Los operadores, como Directv, no sólo «ensucian» la pantalla con comerciales domésticos (de empresas colombianas) que no hacen parte de la pauta del canal de origen, sino que anuncian transmisiones de, por ejemplo, las carreras de Fórmula Uno y, aunque en la parrilla así aparezca, transmiten un torneo de golf.
Pero, adicionalmente, después que anuncian una transmisión de un evento, el día de la transmisión resulta que hay que suscribirse a otro servicio, como está ocurriendo actualmente con los canales de ESPN que aparecen adscritos o como parte de Disney y cuyo costo mensual, adicional al plan de acceso a Directv, se acerca a los $50 mil
¿Qué autoridad vigila las actividades de los operadores de televisión por suscripción en Colombia?
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