Por Edgard Hozzman
A propósito de la excelente celebración de los 70 años de la Asociación Colombiana de Locutores, liderada y organizada exitosamente por su incansable presidente, Armando Plata Camacho, brilla un extenso ciclo de conferencias y la “Exposición Radio Reliquias y Futuro”, en homenaje a la radio colombiana.
Por considerarla propicia, transcribo una gran crónica titulada: “Y la radio resurgió de sus cenizas”, escrita el 11 de febrero de 1984 por uno de los periodistas más cultos de Colombia, Ignacio Ramírez Pinzón, (q.e.p.d.), en la que relata cómo el periodista y escritor, Gustavo Castro Caycedo, que revolucionó ese medio siendo presidente de RCN y a la vez director de su noticiero entre 1983 y 1984. El dictará el 5 de octubre en la ACL, la conferencia: “La de Colombia. La mejor radio del mundo”.
Aquí resumo su trayectoria en los medios de comunicación:
Ignacio escribió: “Un buen día como quienes se deciden por el seminario, por el arte o por volar en cometa, Gustavo Castro Caycedo dio el paso: se retiró del mundo tenso de los ejecutivos, (IBM), e ingresó al mundo intenso de los reporteros que frecuentaba desde 1961”.
“Al lado de Augusto Calderón en Cromos, hizo su primera escuela, combatió armoniosamente con el fantasma deslumbrante de su hermano estrella (Germán), y por sí solo ganó todos los galardones que le llevaron a ser director de “HIT”, para la que se apuntó la chiva doble de idear y traer a Muhammad Alí a Colombia, y volver serio y darle credibilidad al sórdido mundo del espectáculo”.
“Dirigió Elenco, la revista especializada de El Tiempo, tras haber puesto orden en la programación de Punch. Estando allí, el 12 de julio de 1979, el periódico La Prensa Libre, de Costa Rica, informó: ‘30 Minutos de terror. Conferencia de prensa con aviación somocista’. Y en Colombia: ‘A punto de morir dos periodistas colombianos en Nicaragua»… Gustavo Castro Caycedo y Gustavo Barrera”.
“Gustavo descolló como cronista en el diario de los Santos y alternó con la cátedra, en una carrera vertiginosa, notable y válida”.
“En tiempitos libres y en una temporada de paz, se metió a la guerra, y escribió varios libros sobre televisión con los cuales sorprendió hasta a los más eruditos del tema, pues hacía en ellos gala de conocer profundamente un fenómeno que hasta entonces había sido objeto de la “pura paja” de los sabelotodo que no sabía nada”.
“Esto, tal vez, más su condición independiente y seria, fue factor fundamental para que el presidente Belisario Betancur lo pusiera al frente de Inravisión, donde su paso ha sido el más notorio y significativo de toda la historia del Instituto de Radio y TV”.
“RENUNCIÓ PORQUE NO QUISO VENDERLE EL ALMA AL DIABLO”
“Los trabajadores del organismo y los televidentes, (como si fuera poco), respaldaron la gestión de Gustavo y se lamentan aún de que la rastrera politiquería y el vergonzoso cuotaje de influencias políticas propias de la deplorable atmósfera nacional, le hubieran llevado a renunciar con suma dignidad, porque no se dejó manejar por una viceministra marioneta, y porque no quiso venderle el alma al diablo por las lentejas del cargo”.
“Toda Colombia se enteró, en su oportunidad, que Gustavo Castro Caycedo renunció irrevocablemente a Inravisión por honesto y digno y sabe también que, si hubiera seguido allí, la programación de los tres canales no fuese ese triste despelote que muchos hoy lamentan y otros apagan o archivan”.
“El fundador de la televisión colombiana, Fernando Gómez Agudelo, (ejecutivo riguroso), dijo a la revista Cromos: “Gustavo Castro Caycedo, ha sido el mejor director en la historia de Inravisión”. El 23 de marzo de 1983, un boletín de Palacio reproducido por los medios de comunicación, informó: “Belisario Betancur elogia labor de Castro Caycedo”.
“En carta firmada el mismo día, centenares de empleados de Inravisión le pidieron al presidente que no aceptara su renuncia. El temido sindicato de ese instituto, se tomó esa noche los canales 7, 9 y 11, y leyó una arenga en la que le pedían al presidente Betancur, retener a Castro en el cargo”.
INGRESÓ COMO ASESOR DE LA PRESIDENCIA DE RCN AL FINALIZAR 1983
“El Editorial de El Tiempo del 29 de marzo, ‘Guerra de papel’, expresó: ‘En un acto de resistencia que no se veía hace mucho, el tema de la renuncia del ex director de Inravisión, Gustavo Castro Caycedo, sigue acaparando después de una semana las primeras e interiores de los distintos diarios. La controversia persiste en los medios radial televisivo”.
“Con la televisión en tales condiciones, Gustavo vio en la radio su gran meta y aprovechó la oportunidad que le sirvieron. Ingresó como asesor de la presidencia de RCN al finalizar 1983, y a los 10 días ya había llamado a brillantes periodistas especializados con quienes conformó un equipo de batalladores que le pusieron la cascarita a Caracol”.
“Primero les mostró que la pelea era peleando: Reconstruyó en cuestión de horas las más trascendentales noticias de los últimos 20 años y montó con ellas un espléndido programa gigantesco de comienzos de año e hizo de RCN-84 la imagen de los verdaderamente nuevo y bueno. Los especiales se sucedieron semana a semana y le dieron audiencia a RCN”.
“Llevó a su lado el general Alvaro Valencia Tovar como comentarista Internacional, a Alberto Dangond Uribe; y a periodistas como Antonio José Caballero, Jorge Graciano, Jota Mario Valencia, Alfonso Morillo, Germán Manga, José Vicente Arizmendi, Judith Sarmiento, Eduardo Aponte, Ernesto Rojas, Amparo Figueroa, Rosario Del Castillo, entre otros muchos idóneos y “echaos pa´lante”, con quienes puso a RCN-84 en plan real de competencia con Caracol que antes era única y que tuvo conciencia de que existe ahora sí la competencia, leal, seria, y profesional”
“LEVANTO A RCN Y LUEGO SE LLEVÓ A JUAN GOSSAÍN COMO DIRECTOR DE NOTICIAS”
“Y luego de levantar a la cadena y la audiencia, y de conformar ese gran equipo periodístico, Gustavo se llevó a Juan Gossaín, figura popular de Caracol y le integró como director nacional de noticias de RCN”.
“No suele suceder que los medios de comunicación den noticias de sí mismos y mucho menos de sus colegas. Pero, en este caso, la prensa nacional, la televisión y la propia radio, han hecho despliegue considerable del hecho de que la presencia de Gustavo Castro Caycedo en RCN ha puesto en plan de nuevo ciclo de altura a la radio colombiana”.
“Sería tal su logró que a los pocos días de estar en la cadena, a la que entró como asesor, fue promovido a la presidencia, marcando un hito en la historia de ejecutivos de las grandes potencias financieras y de opiniones nacionales”.
“Las cosas van muy bien, no porque lo digamos. Usted puede encender su radio y darse cuenta, el milagro se logró: en menos de 2 meses estuvo plenamente consolidada una programación profesional que tuvo en cuenta una encuesta nacional de radio escuchas ideada, promovida y coordinada también por el cerebro de esta historia para identificar las prioridades, expectativas, necesidades problemas y gustos populares con los espacios radiales”.
“El 28 de agosto, de 1984, un título lo destacó en página completa, como: ‘El hombre que le puso el cascabel a Caracol’. El 18 de abril, El Tiempo había titulado: ‘Récord de RCN’. Y dijo: ‘Nunca una cadena acumuló tantos éxitos en tan poco tiempo”.
“Por primera vez en la historia de la radio un periodista ha sido nombrado presidente de una cadena. RCN, bajo el comando de Gustavo Castro Caycedo, ex director de Inravisión, ha dado un vuelco total desde el primer día de 1984. Castro no solo está dedicado a las gestiones de su carrera, sino que también al ejercer su profesión periodística, crea y planea los grandes especiales que como el que se inicia hoy, se suceden mes a mes con exitosos resultados».
* Paradójicamente este capítulo histórico de la radio no figura en el libro “biblia” de los 100 años de la radio y 90 en Colombia.
GUSTAVO GOMEZ CORDOBA: “UN TIPO ÚNICO”
El director de noticias de Radio Caracol, Gustavo Gómez Córdoba, prologó el libro 40 de Gustavo Castro Caycedo, “Desde el amor hasta la guerra”, y dice:
“El autor de este libro lo ha sido todo. Porque, como notable periodista, ha superado el récord de las seis décadas metiéndose en docenas de mundos, para entenderlos y contarlos. Que es lo que, en términos sencillos (que nos encanta enredar) es el periodismo: contar. Pero no contar de cualquier manera”.
“Gustavo Castro Caycedo ha contado las cosas con apego a la búsqueda de la verdad y, sobre todo, con un respeto por los protagonistas de sus trabajos, y una rectitud impecable. Lo sé, porque lo conozco. Sé de lo que está hecho y ojalá vendieran la receta de la masa con que lo metieron al horno”.
“Hoy, como nunca, en tiempos de incertidumbre universal (cósmica, dirían algunos), el país necesita de más periodistas como él; probados en todas las pistas, sumergidos en todas las aguas, pasados por todas las llamas. Periodistas que se resistan a las veleidades del poder, que se alejen de la militancia, que separen sus pasiones del trabajo, que no crean que los éxitos digitales son el fin del camino y que no sucumban a las tentaciones de lo exprés”.
“El periodismo es un oficio, lo que quiere decir que se aprende y perfecciona con la práctica, y teniendo buenos maestros como ejemplo a seguir. Por eso Gustavo Castro Caycedo es un maestro. Quienes han tenido el privilegio de trabajar a su lado, han aprendido en semanas lo que otros en una cascada de semestres universitarios. Maestro en materia de la técnica, pero, sobre todo, de la ética, que es una de las herramientas infaltables del periodista”.
“Sesenta y dos años son una vida. Es la edad de jubilación. Y son la carrera periodística de un colega que, a estas alturas, ya estaría, como porcelana fina, resguardado en algún mueble de abuela. No es así. Este libro, para que ustedes estén preparados, revela sutilmente la fórmula de su eterna juventud. Lo que no pudo Ponce de León, lo ha logrado este zipaquireño imbatible”.
“El misterio de estas páginas no lo es tanto, porque lo había explicado otro maestro, Ryszard Kapuscinski: ‘Creo que, para ejercer el periodismo, ante todo, hay que ser un buen hombre, o una buena mujer: buenos seres humanos. Las malas personas no pueden ser buenos periodistas. Si se es una buena persona, se puede intentar comprender a los demás, sus intenciones, su fe, sus intereses, sus dificultades, sus tragedias. Y convertirse, desde el primer momento, en parte de su destino”.
“Las malas personas pueden ser exitosos periodistas; pero solo las buenas personas pueden ser buenos periodistas. Y Gustavo Castro Caycedo, siempre envuelto en su sensata humildad, está en el Olimpo del buen periodismo de este país”.
MINIRESUMEN DE LA TRAYECTORIA GUSTAVO CASTRO CAYCEDO
“Premio Nacional de Periodismo CPB Guillermo Cano Mérito Periodístico a una Vida y Obra”, 2021 en la celebración de los 75 años del Círculo. Justificación: “Por su pasión por el periodismo, al que ha dedicado la vida, y sus aportes y conocimientos a las letras latinoamericanas, al gremio y a las nuevas generaciones”.
Director de los especiales que dieron a RCN el “Premio Internacional España de Radiodifusión 1984 como la Entidad radial más importante del Mundo Hispano, entre 27 de países”; el galardón más importante ganado por RCN Radio en toda su historia. Creador y director del programa “Testimonio”, declarado por El Tiempo como “uno de los cinco mejores programas periodísticos de la TV colombiana en el Siglo XX”. “Premio de Periodismo de la Organización de Cooperación Iberoamericana”, 1990; y otros varios galardones.
Autor de 40 libros y coautor de 11 más. Administrador de Empresas, con la Tesis Administración de Televisión para la paz”. Director de Inravisión; presidente de RCN Radio y del CPB. Vicepresidente del Directorio de la Organización Internacional de Defensorías de las Audiencias y del Consejo Nacional de la Televisión. Director de los Noticieros RCN Radio y Cinevisión; de varias revistas y programas de TV. Columnista de: El Tiempo, El País, y de otros medios.
Asesor del Instituto Anticorrupción de la Universidad del Rosario. Profesor universitario y director de 34 tesis de grado. Comisionado por los presidentes Virgilio Barco, Belisario Betancur y Ernesto Samper, para el Empalme de sus gobiernos en el área de las Comunicaciones.
El doctor Gustavo Castro Caicedo,para mí es toda una autoridad en el desarrollo histórico de la televisión colombiana, tanto publica como privada, defensor en su momento director de inravision, del auténtico papel de la televisión publica e impulsor en el avance de la televisión comercial.