Martes de la luenga lengua: Ciento, a (en el acusativo), mucho más, requerir

QUISQUILLAS DE ALGUNA IMPORTANCIA 

 por  Efraim Osorio López/La Patria

eolo1056@yahoo.com

En las combinaciones ‘mucho más’ y ‘mucho menos’, el término ‘mucho’ puede ser adverbio o adjetivo.

Durante la transmisión del partido Brasil-Colombia (20/3/2025) aparecía en la parte inferior de la pantalla la publicidad del sistema de apuestas deportivas Rush-Bet, y se oía al anunciante decir: “…y recibe el cien por ciento de tu depósito”. Correctamente, aunque en esto hay anarquía, “…el ciento por ciento…”. El número es ‘ciento’; su plural ‘cientos’*, y su apócope, ‘cien’, que se emplea cuando precede al sustantivo cuya cantidad numérica determina, aunque se interponga un adjetivo, verbigracia, ‘cien combatientes’, ‘cien osados combatientes’. *Dice el Diccionario panhispánico de dudas: “No existe el plural ‘cienes’, salvo para hacer referencia al guarismo: Escribe dos cienes en este papel”. La misma fuente afirma que la locución ‘ciento por ciento’ es la preferida en América; en España, ‘cien por cien’*, incorrecta sin duda, a pesar de que en ciertos casos la forma apocopada ‘cien’ se use en lugar de ‘ciento’, como en la enumeración (‘…noventa y ocho, noventa y nueve, cien’) y en otros casos. El diccionario de la Real Academia Española asienta las locuciones siguientes: ‘al cien por cien’ (‘en su totalidad, del principio al fin’) y ‘a cien’ (‘en o con un alto grado de excitación’). ***

Titular de El Tiempo: “Rescatan a perro en poder de disidentes” (Colombia, 21/3/2025). No es la primera vez que los tituladores del periódico capitalino emplean equivocadamente la preposición ‘a’ en esta clase de oraciones, en las que no es necesaria la ‘determinación’: “Rescatan perro (o ‘un perro’) en poder de los disidentes”, castizamente. Como la nota periodística aludía a  ‘Tuerca’, nombre del “canino belga malinois”, educado para alertar sobre la presencia de la Fuerza Pública, el titular apropiado pudo ser éste: “Rescataron a ‘Tuerca’, en poder de…”. En esta construcción es indispensable la preposición para determinar el complemento directo del verbo: no suena bien, y el mismo oído lo rechaza, decir “rescataron ‘Tuerca’…”, por la omisión de la preposición, como en el siguiente titular de LA PATRIA: “Las secuelas del turismo que merodean Montaño” (Enfoque, 23/3/2025): “…que merodean a Montaño”, así, porque ‘Montaño’ es el nombre  de una vereda de Villamaría (Caldas), y los nombres propios, como lo anoté hace poco, piden la preposición ‘a’ cuando son el complemento directo de la oración. ***   

En las combinaciones ‘mucho más’ y ‘mucho menos’, el término ‘mucho’ puede ser adverbio o adjetivo. Como adverbio, es invariable, por ejemplo, ‘Lucía es mucho más hermosa que sus primas’, ‘hoy estamos mucho menos tranquilos que ayer’. Como adjetivo, lógicamente, es variable en género y número, verbigracia, ‘son muchas más las personas que sufren en silencio’, ‘hay mucha más gente en la ciudad que en el campo’, ‘son muchos más los desencantados de este gobierno’. El columnista de LA PATRIA Fernando Alonso Ramírez no tuvo en cuenta esta diferencia y escribió así: “…que son los pequeños detalles los que se nos quedarán en la memoria, seguro con mucho más fuerza que las técnicas que nos esforzamos tanto en aprender” (Papel salmón, 22/3/2025). “…con mucha más fuerza…”, correctamente, porque en esta oración ‘mucha’ es adjetivo, que debe concordar con ‘fuerza’, femenino. ***

La preposición ‘de’ introduce complementos que expresan ‘posesión’ (‘la casa de los abuelos’), ‘procedencia’ (‘venían de Tamalameque’), ‘contenido’ (‘vaso de agua’), etc., pero no el ‘objeto’ de la acción del verbo (complemento directo). Es muy frecuente su empelo innecesario con los verbos ‘requerir’ y ‘necesitar’, como en esta muestra: “Requerirá de una buena campaña y, en la medida de lo posible, coordinación de los sectores de oposición…” (El Tiempo, José Manuel Acevedo M., 25/7/2025). Suficiente, “Requerirá una buena campaña…”, porque, además, el verbo ‘requerir’ es transitivo. Excepción: ‘requerir de amores’ (‘solicitar el amor de una mujer’).

Martes en Sevilla, España

TELEFONÍA MÓVIL, CLAVES DE REDACCIóN

Por Fundación para el español urgente/RAE

Con motivo de la celebración en Barcelona del Mobile World Congress (MWC), se ofrecen a continuación algunas claves para una buena redacción de las informaciones relacionadas con ese sector.

1. Teléfono, reloj o anillo inteligente

Teléfono inteligente, reloj inteligente y anillo inteligente son, respectivamente, alternativas adecuadas en español a las expresiones inglesas smartphone, smartwatch y smart ring.

2. La expresión inteligencia artificial, con minúsculas

La denominación inteligencia artificial se escribe con minúsculas, ya que es una expresión común. También van con minúscula los adjetivos que se le puedan añadir, como generativa. En cambio, la sigla IA, mejor que la inglesa AI, sí se escribe con mayúsculas.

3. 5G y 3D, mejor sin guion

La forma 5G, que se usa para aludir a la quinta generación de tecnología móvil, se escribe preferiblemente sin guion entre la cifra y la letra. Esta recomendación también se aplica a otras siglas como 3D, por ejemplo, en comunicación 3D.

4. Empresa emergente, mejor que start-up

Con el anglicismo start-up se conoce en el mundo de los negocios y la innovación a aquellas sociedades que, pese a su juventud y falta de recursos, consiguen obtener buenos resultados en el mercado y pasan a ser impulsadas por otros inversores o absorbidas por empresas ya consolidadas. Se recomienda emplear la alternativa empresa emergente.

5. Tecnología ponible, mejor que tecnología wearable

Es preferible la construcción tecnología ponible a la denominación inglesa wearable technology y a la fórmula mixta tecnología wearable. Para aludir en general al conjunto de estos dispositivos, es adecuado el término ponibles: «Es probable que las compañías introduzcan innovaciones en los ponibles».

6. Pantalla, mejor que display

La voz inglesa display puede sustituirse en español por pantalla (de visualización) o visualizador.

7. Píxel y pixel, ambas válidas

Tanto píxel (llana) como pixel (aguda) son válidas para aludir al elemento mínimo de ciertos tipos de imágenes. La primera es habitual en España y la segunda es la mayoritaria en muchos países de América. El plural se forma añadiendo -es, es decir, píxeles y pixeles. Los de megapíxel y megapixel (escritos en una sola palabra) son megapíxeles y megapixeles.

8. Producto insignia, mejor que flagship

Para referirse a un producto muy característico de una empresa, se recomienda utilizar producto insignia como alternativa al anglicismo flagship. Este extranjerismo se aplica también a tiendas, empresas y, en general, a cualquier elemento representativo y distintivo dentro de un conjunto, por lo que se puede sustituir por opciones como tienda insignia o empresa insignia, según el caso.

9. Tecnología táctil, mejor que tecnología touch

Al hablar de los dispositivos que se manejan sin necesidad de un teclado, un ratón…, esto es, mediante el contacto directo de los dedos principalmente, se recomienda emplear tecnología tácil en lugar de tecnología touch.

10. Cámara selfi, mejor que cámara selfie

La grafía selfi, plural selfis, es la adaptación de la forma inglesa selfie que recoge el diccionario académico. Es un término empleado para referirse a las fotografías que uno toma de sí mismo, solo o en compañía de otros, y, por extensión, a las cámaras frontales de los dispositivos con los que se hacen estas fotografías.

En cuanto a acentos

Por Mauricio Pombo

En cuanto a los acentos, aquello de que hablamos el mejor español es otro mito. Basta con pensar en lo del acento neutro, cosa que no existe. En la misma Colombia diferenciamos entre costeños, paisas, pastusos, boyacenses, santandereanos, etc. Y los costeños se diferencian entre sí, barranquilleros, cartageneros y samarios saben que esto es así. Lo que en el mundo hispanohablante se conoce como acento colombiano es el paisa, que es lo que más se oye en las series sobre la mafia. Habría que agregarle algo de valluno. Lo que no quiere decir que el resto del país no esté infestado de narcotráfico.

No hay mejor español, hay diferentes maneras de hablarlo y todos son igual de buenos o malos.

En Colombia ya casi no se oye, solo se escucha, y nada se pone, todo se coloca. Es la evolución-involución de una lengua a la que pertenecemos la mayor parte de quienes habitamos este medio hemisferio que va desde el río Grande hasta la Patagonia. Desde El Paso (bello nombre para entrar y salir) hasta Ushuaia.

Y en este territorio hay una finca muy grande, conocida como Córdoba, que pudimos ver hace poco, llena de yeguas y caballos, toros y vacas (lenguaje inclusivo), gallos y gallinas y uno que otro pavo real, y desconozco el acento cordobés.

País de barras muy bravas, en el fútbol y en la política. La izquierda tras de su mesías y la derecha detrás del propio, a ritmo de fanaticada, de hinchas que no perdonan contradictores. Y que hablan su propio lenguaje, ‘parece’.

Basta con leer lo que se escribe en las redes sociales, donde se supone que la mayoría son universitarios, o al menos tienen título de bachiller, para constatar que en Colombia ni se habla ni se escribe el mejor español del mundo.

Completa o totalmente gratis, oye uno en la publicidad radial. ¿Acaso no sería suficiente con decir gratis? O, ¿existe un parcialmente gratis?

Cuál viene a ser la diferencia entre: qué porrazo, qué guamazo, qué totazo, qué coñazo, un tomatazo, un bergajazo (un tipazo), chiripazo, codazo, abrazo, papayazo. Y podría seguir hasta el cansancio enumerando palabras que terminan en azo, muy nuestras.

En todo caso, revisar el trato que le damos a nuestro idioma, en todos los escenarios, constituye un mazazo para los que lo defendemos.

EN POCAS PALABRAS

George Burns, (1896- 1996). Falleció a los 100 años de edad. (Excelente actor, autor de las siguientes frases, de su vida diaria).


* El sexo es una de las 9 razones por las que me gustaría reencarnarme. Las otras 8 son irrelevantes”.

* La gente me preguntaba qué regalo apreciaría más para mi cumpleaños 87. Les contesté: “Una demanda de paternidad”.

* Me encanta cantar y me encanta tomar whisky. La mayoría de las personas prefieren escucharme tomar whisky.

* Primero te olvidas de los nombres. Luego te olvidas de las caras. Después te olvidas de subirte la bragueta. Finalmente te olvidas de bajártela.

* La felicidad es tener una familia grande, amorosa, dedicada, unida y en otra ciudad.

Sobre Revista Corrientes 5259 artículos
Directores Orlando Cadavid Correa (Q.E.P.D.) y William Giraldo Ceballos. Exprese sus opiniones o comentarios a través del correo: williamgiraldo@revistacorrientes.com

Sé el primero en comentar

Dejar una contestacion

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.


*