Revista Raya y Señal Investigativa revelan las matrículas y fotos de los aviones, y los nombres de los pilotos de las dos aeronaves que aterrizaron en Bogotá el 25 de junio de 2021 y el 18 de septiembre del mismo año. Los hombres están relacionados con la Fuerza Aérea de Israel y con empresas de software y ciberseguridad.
Por: Revista RAYA y Señal Colombia
Las fechas coinciden con las indicadas por el presidente de la República, Gustavo Petro, el pasado 4 de septiembre, cuando, en una alocución sorpresiva, reveló que el negocio de la compra del virus espía Pegasus se concretó el 27 de junio de 2021 y el 22 de septiembre del mismo año, en pleno gobierno de Iván Duque. Con información obtenida en Israel y Colombia, se pudo establecer que el primero de los vuelos lo hizo un avión bombardero de matrícula M-AGGB Challenger, el cuál fue diseñado por la empresa canadiense Bombardier en 1986, con el fin de aumentar la velocidad y desarrollar viajes intercontinentales sin escalas.
Este bombardero, el M-AGGB, partió de Tel Aviv a las 12:32 de la mañana el 25 de junio de 2021. Hizo su primera parada en las Islas Canarias, al sur de España, a las 9:07 de la mañana. La segunda parada fue en Isla Margarita, en Venezuela, a las 5:11 de la tarde ese mismo día. Finalmente, aterrizó en Bogotá a las 8:30 de esa noche.
El bombardero se mantuvo en tierra durante 21 horas el 26 de junio y partió rumbo a Tel Aviv a las 5:30 de la tarde. De regreso a Israel, hizo una parada en Santo Domingo (República Dominicana) a las 9:18 de la noche y volvió a aterrizar a las 3:23 de la madrugada del 27 de junio en las Islas Canarias y arriba a Tel Aviv a las 9:00 de la mañana, hora de Colombia ese mismo día. Tres días después, según el reporte del banco de Israel, Hapoalim, la empresa NSO Group (fabricante y cerebro de Pegasus) reportó la primera transacción por 5.5 millones de dólares por la compra del software por parte del gobierno olombiano, en cabeza del presidente Iván Duque.
El piloto de este avión (M-ABGG) es el israelí Amir Sade. Este hombre se describe en su hoja de vida como un experto en la integración de productos de software y hardware. Igualmente, afirma que su experiencia se basa en ser gestor de cuentas de empresas que suministran productos y servicios a la industria militar. Sade trabajó durante dos años en una empresa israelí que presta servicios de investigación; igualmente, durante 11 años, fue empleado de Elbit Systems, una de las principales compañías tecnológicas fabricantes de materiales electrónicos de defensa de Israel.
Esta misma empresa se exhibió en Corferias (Bogotá) durante el evento de Expodefensa, el 3 de diciembre de 2021. En este evento participaron el general Yahir Kulas de Israel, el jefe de las empresas de exportación de defensa de ese país, el mismo que dio el visto bueno para que el banco israelí recibiera la inusual cifra de 11 millones de dólares en efectivo a nombre de la empresa fabricante de Pegasus: NSO Group. Ante el reporte inusual y sospechoso del banco por dicha consignación, fue Kulas el encargado de destrabar la recepción del dinero en Tel Aviv.
Al periodista Gur Megiddo, del periódico Haaretz de Israel, el banco Hapoalim le respondió que la parte colombiana aseguró que el dinero provenía del narcotráfico, pues había sido incautado a carteles de la droga y querían usarlo. Como la información habla de una incautación, se trataba de una agencia del estado que solo hasta el pasado 4 de septiembre se supo, según aseguró el presidente Petro, se trataba de la Dirección de Inteligencia Policial (Dipol). El gran problema, que nunca supo el banco, es que dicho dinero no dejó rastro en Colombia, es decir, hoy se investiga una operación secreta de lavado de activos.
Los otros participantes del evento en Corferias, junto al general Kulas, fueron el entonces ministro de Defensa, Diego Molano; el veceministro de Defensa, Jairo García, y el general Eduardo Zapateiro, entonces comandante del Ejército.
Volviendo al piloto Amir Sade, del vuelo m-abgg, que transportó los primeros 5.5 millones de dólares en efectivo desde Bogotá hasta Tel Aviv, subraya en su hoja de vida que trabaja en la industria “panadera” de Israel.
El otro vuelo lo realizó la aeronave de matrícula T7CPX, casualmente, el jet privado favorito del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, el cual ha usado para misiones secretas como la que realizó el 23 de noviembre de 2020 a la conocida megaciudad Saudi de Neón, a orillas del Mar Rojo, como lo muestra la imagen. Este es un espacio fronterizo entre Arabia Saudí, Egipto y Jordania. Allí, estuvo 5 horas en tierra.
En el caso de Colombia, para la segunda misión de recoger los 5.5 millones de dólares restantes por el pago de la compra del virus espía Pegasus, este avión de matrícula T7CPX partió de Tel Aviv a las 9:07 de la noche del 17 de septiembre de 2021. Al día siguiente, el 18 de septiembre de 2021, tuvo una parada a las 11:13 de la mañana en Santo Domingo, República Dominicana.
Finalmente, la aeronave T7CPX, llegó a Bogotá a las 7:43 de la noche el 18 de septiembre de 2021. Este avión se mantuvo en tierra durante 30 horas y partió nuevamente a Israel el 19 de septiembre de 2021 a las 9:43 de la noche. Llegó a Tel Aviv, Israel, a las 2:57 de la tarde, hora de Colombia. En esta aeronave viajaban ocho personas de nacionalidad israelí, incluido el piloto.
¿Quién es el piloto de esta aeronave T7CPX? se trata de Yaniv Hait, un israelí que trabajó en la fuerza aérea de ese país entre 2006 y 2017, es decir, por más de 10 años. También en la empresa Camicaze, especializada en el manejo de drones en el mundo y actualmente trabaja en la empresa Yaas, una sociedad franco-marroquí, fundada por expertos en sistemas de información.
Esta aeronave proviene de una familia de aviones birreactores, principalmente para uso privado o de negocios. Fue construida por la empresa Gulf-stream Aeroespace en Georgia, Estados Unidos, y es un avión con capacidad para 14 pasajeros, pero en esta misión secreta, para cobrar el dinero con que el Gobierno colombiano compró Pegasus, los tripulantes fueron siete. Señal Investigativa tiene en su poder los nombres de todos los tripulantes de los dos aviones: 15 en total.
La compra de Pegasus para Colombia, sucedió tres meses antes de que se realizara una visita oficial histórica a Israel por parte del presidente Iván Duque y su comitiva de defensa. Sucedió el 7 de noviembre de 2021. A finales de octubre sus funcionarios del Ministerio de Defensa y varios generales del Ejército, viajaron a Tel Aviv en lo que se denomina la avanzada, con el fin de afianzar mucho más sus relaciones en materia de equipos de monitoreo, sistemas de información y defensa de Israel en Colombia.
Esa comitiva estuvo integrada por el entonces viceministro de Defensa, Jairo García, actualmente Secretario de seguridad de Cali y uno de los principales sospechosos de la negociación secreta. De hecho, se reunió personalmente con el general Yair Kulas y producto de las reuniones públicas, Colombia adquirió un sistema de monitoreo y vigilancia para el nororiente de la frontera con Venezuela. El equipo se denomina: Elbit System Land and C4i Tadirán. Este convenio le costó al país, en un negocio por encima de la mesa, 30 millones de dólares.
Los generales que acompañaron al viceministro García fueron: Juan Diego sepúlveda, quien era el comandante del Comando Conjunto Cibernético de las Fuerzas Militares durante el gobierno de Duque; el general (r) Carlos Iván Moreno Ojeda, quien era segundo al mando del comandante del Ejército, Eduardo Zapateiro, es decir, su hombre de confianza; y Wilson Neyid Chawéz, entonces jefe de operaciones conjuntas de las Fuerzas Militares.
Una operación secreta entre Israel y Colombia
El pasado 26 de marzo, el periodista Gur Megiddo, del periódico Haaretz de Israel, reveló una noticia que sorprendió al mundo: el Gobierno colombiano en 2021, en cabeza del presidente Iván Duque, compró el virus espía Pegasus con dinero en efectivo y de manera clandestina. Esta operación se realizó, según esa investigación, gracias al apoyo y gestión del general israelí, Yair Kulas, el director de exportaciones de la industria cibernética y de armas de Israel, quien fue el encargado de dar el visto bueno para que el banco israelí recibiera 13 millones de dólares en efectivo, dijo entonces Hareetz. Una cifra inusual, pues se trataba de más de 40 mil millones de pesos colombianos en billetes.
Posteriormente, el 28 de julio de 2024, Señal Investigativa entrevistó al periodista israelí, Megiddo, quien reveló que el virus espía Pegasus se compró con dineros incautados al narcotráfico y que la plata fue consignada por la empresa NSO Group, fabricante y dueña de Pegasus, en el banco más grande de su país: el Hapoalim.
“Yo pregunté, porque me preocupaba, como hay muchas leyes del lavado de dinero, como es un monto tan grande, son 13 millones de dólares, la primera cosa es cómo hacemos para saber que ese dinero es lícito y no proviene de una actividad ilegal. Una de las preguntas que se le hizo a las fuentes es qué información tiene sobre esto y cuál es su entendimiento sobre el origen de esos dineros a lo que respondió que ese dinero fue incautado a carteles de la droga y que lo tenían disponible, entonces era una oportunidad para gastarlo, que estaba por fuera de la red, que no era oficial. Entonces, para las autoridades israelíes, tenía sentido poder utilizar ese dinero”, reveló el periodista Gur Megiddo en entrevista con Señal Investigativa.
Igualmente, se revelaron fotografías de la comitiva de Iván Duque que, precisamente posterior a la negociación de Pegasus, viajó a israel para afianzar las relaciones diplomáticas de manera más cercana con Israel, un país que ha utilizado, con los países aliados a su causa, el virus espía como una moneda diplomática.
Tras estos hallazgos, el 4 de septiembre pasado el presidente de Colombia, Gustavo Petro, confirmó que el virus espía había sido comprado por la Dirección de Inteligencia Policial (Dipol) durante el gobierno de Duque, y que el dinero salió del país en dos vuelos: los primeros 5.5 millones de dólares el 27 de junio de 2021, los cuales fueron depositados por la empresa en el banco israelí el 30 de junio, es decir, tres días después de salir de Colombia. Los otros 5.5 millones de dólares, según la información del presidente Petro, salieron de Colombia el 22 de septiembre de 2021.
En septiembre pasado, la Dirección Nacional de Inteligencia (DNI), reveló en Señal Investigativa que esa entidad hizo la trazabilidad del dinero en efectivo en Colombia, pero que la empresa NSO Group no dejó rastro de la salida del dinero en efectivo desde el país. No aparece reporte en la Dian lo que confirma, según el director de la DNI, Jorge lemus, que se trató de un lavado de activos por parte de quienes pagaron el software espía Pegasus, es decir, el gobierno de Duque y la Dipol, como quedó registrado en el banco israelí que generó una alerta sospechosa cuando se depositó este dinero el efectivo.
“El documento que se consiguió del Impa (Autoridad de Prohibición del Lavado de Dinero y el Financiamiento del Terrorismo) de Israel, ahí está totalmente claro que esa plata entró a israel, entró a NSO Group y ahí está claro que fue el Gobierno colombiano pasado fue el que lo entregó. Una cosa es que aquí no lo hubiesen reportado para la compra de ese virus. Nosotros en la investigación que estamos haciendo tenemos la certeza que es un lavado de dinero, típico lavado de activos. Sí bien las autoridades de Israel se dieron cuenta de la entrada de ese dinero allá, es como si la empresa NSO Group hubiese hecho las cosas legales allá, pero acá no. De Colombia salió ilegalmente. Claro, estaban cometiendo fechorías, estaban haciendo algo ilegal y eso lo hicieron con toda la intención quienes lo hayan hecho”, aseguró Lemus, director de la DNI.
La estrategia del partido Centro Democrático, del expresidente Iván Duque, de dos de sus exfuncionarios de alto nivel y varios generales del Ejército y la Policía, ha sido negar que esta operación secreta se haya realizado. Así lo hizo el entonces director del Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre), Víctor Muñoz, quien, como hemos revelado en otros programas sobre Pegasus, es un experto en temas de software en el mundo desde hace más de una década y quien tendría guardado mucho dinero en Estados Unidos que no declara ante las autoridades colombianas, según contó una fuente de ese país para esa investigación.
“El origen de esa información arranca por Hareetz, pero de ahí en adelante hablan sobre el mismo tema sin aportar una sola prueba. Hablan de un avión, hablan de viajes a Israel, en algún momento de dineros del narcotráfico, el presidente mencionó en su alocución que esto estaba relacionado con el paro del 2021 en el mes de julio y en ese mes ya se había acabado el paro. Pero sí usted revisa también lo que escribió en su momento la Revista RAYA o lo que hizo RTVC, las fechas entre ellas es contradictorio. El mensaje es: eso no existió y lo que se siente es que que se está tratando de generar una narrativa sobre un hecho que es absolutamente falso”, aseguró Víctor Muñoz, director de Dapre del gobierno Duque en Caracol Radio, quien sin haber sido mencionado en el escándalo ni tener mucho que ver con la seguridad nacional durante su función en la Casa de Nariño, salió sorpresivamente a tratar de desmentir las revelaciones.
Luego, el entonces viceministro de Defensa, Jairo García, actual Secretario de Seguridad de Cali y uno de los cerebros del ataque policial al estallido social en Bogotá que terminó con la muerte del estudiante Dilan Cruz, a manos de la Policía el 23 de noviembre de 2019. “Ningún tipo de transacción de esas características se realiza. Siempre se hacen equipos técnicos legales, que lo que hacen es desarrollar ese convenio gobierno a gobierno, definiendo claramente cada uno de los roles de las partes. bajo ninguna circunstancia ni el gobierno Duque ni el ministerio de defensa, quienes lideramos ese ministerio, desarrollamos ese tipo de actividades de esa manera”, dijo el exviceministro Jairo Garcia.
Tras el escándalo, un sector de la prensa también ha intentado instalar en la opinión pública la idea de que la compra de Pegasus por el gobierno de Duque es una teoría conspirativa, es decir, una mentira. Por ejemplo, La FM, a través de Darcy Queen, afirmó que se trataba de una teoría conspirativa de la Revista RAYA y Señal Colombia, tratando de desviar el debate y enlodar al mensajero, es decir, a la prensa.
Incluso, Vicky Dávila, directora de la Revista SEMANA, increpó al presidente Petro, quien, a través de su cuenta de X, denunció recientemente a los exfuncionarios antes mencionados: el exdirector de Dapre, Víctor Muñoz, y los generales retirados Eduardo Zapateiro y Jorge Luis Vargas, deben rendir cuentas a la justicia por la compra ilegal de este virus espía. “El exgeneral Zapateiro, el general Vargas, el expresidente Duque, el señor Muñoz y el exministro Molano deben responder. No importa sus amenazas de golpe y su saboteo al actual Gobierno, no importa la cantidad de funcionarios con los que aún cuentan en las tres ramas del Estado para encubrirse, ustedes deben responder por un hecho que implica lavado de activos, y violación de los derechos humanos de la juventud colombiana y la oposición”, escribió Petro.
Ante esto, la periodista Dávila, intentó defender a los exfuncionarios asegurando que la justicia debe ser justa Y pidió que se revelen pruebas. “En vez de estar lanzando globos, digan cuál es la matrícula, revisen quién viajó en esos aviones, y a quien le pertenecen. Lleguen al fondo del asunto, no es complicado. Pero no lancen acusaciones a personas sin terminar la investigación”.
Hoy, Señal Investigativa ha revelado las matrículas, las fotos de los aviones y los nombres de los pilotos de los dos aviones que aterrizaron en colombia en las fechas indicadas por el presidente de la República, Gustavo Petro, el pasado 4 de septiembre, cuando, en una alocución presidencial, reveló que el negocio de la compra del virus espía Pegasus sí se concretó entre el 27 de junio de 2021 y el 22 de septiembre del mismo año, de acuerdo al reporte de transacciones de aduanas de Israel.
Lo que le costó Pegasus al gobierno de Duque fueron 11 millones de dólares, según lo reveló, con documentos de Israel en mano, el presidente Gustavo Petro en septiembre pasado. Sin embargo, el periodista israelí, Gur Megiddo, afirmó que fueron 13 millones de dólares. La diferencia entre las dos cifras correspondería al valor del alquiler de los aviones para transportar el dinero en efectivo.
Desde hace una década el primer ministro israelí, Benjamín Netanyaju, ha usado el virus espía Pegasus como una moneda diplomática que la intercambia con sus países aliados en diferentes partes del mundo. En el caso Colombia no ha sido la excepción. La lista de países es larga y una investigación periodística de carácter internacional llamada Proyecto Pegasus, así lo puso en evidencia: al menos siete países, sin cortar Colombia, fueron visitados por Netanyahu, con el fin de promover el virus espía como una herramienta tecnológica muy potente y a su alcance. De hecho, viajó con funcionarios de la empresa NSO Group a varios de ellos.
México, Ruanda, Hungría, Estados Unidos, India y Marruecos, son algunos ejemplos de sus giras diplomáticas, en donde, posteriormente a las visita del primer ministro Netanyaju, han habido escándalos por la presencia del virus espía en los celulares de periodistas, defensores de derechos y la oposición política a Israel, el país hoy acusado de cometer un genocidio en Palestina.