El fundador de Wikileaks, Julian Assange, ha quedado este martes en libertad tras concluir un acuerdo con el Departamento de Justicia de Estados Unidos por el que se declara culpable de violar la Ley de Espionaje de ese país por su papel en la obtención y publicación en 2010 de más de 200.000 cables de la diplomacia estadounidense. Ese pacto recoge que Washington considera que Assange, de 52 años, ya ha cumplido la sentencia que conlleva ese cargo de espionaje por los cinco años que ha pasado en prisión en el Renio Unido. Antes había permanecido otros siete años refugiado en la Embajada de Ecuador en Londres. Estos son los hitos que han marcado uno de los procesos judiciales en la defensa universal de la libertad de prensa más importantes de este siglo.
2006
Fundación de Wikileaks
El australiano Julian Assange, entonces de 35 años, funda junto a otros activistas Wikileaks, una organización multinacional de medios sin ánimo de lucro que se define como “especialista en el análisis y publicación de grandes conjuntos de datos de materiales oficiales censurados o restringidos que involucran guerra, espionaje y corrupción”, según consta en su página web. Desde su creación, ha divulgado más de 10 millones de documentos.
2010
Filtración masiva de documentos y el ‘Cablegate’
2010 es el año cumbre de las filtraciones de Wikileaks. En abril, la web de Assange publica un vídeo en el que se ve a soldados estadounidenses disparar desde un helicóptero a dos reporteros de la agencia Reuters en Bagdad. En solo 72 horas, el vídeo da la vuelta al mundo y obtiene más de cuatro millones de visitas en YouTube. Entre julio y octubre, la organización hace públicos decenas de miles de documentos en relación con las guerras de Irak y Afganistán que sacaron a la luz, entre otras cosas, la corrupción en el Gobierno afgano apoyado por Occidente y cifras más elevadas de muertos que las conocidas durante los conflictos.
Pero es en noviembre de ese año cuando Wikileaks filtra a cinco cabeceras internacionales ―The Guardian, The New York Times, Le Monde, Der Spiegel y EL PAÍS― más de 200.000 cables diplomáticos del Departamento de Estado de EE UU y sacude la diplomacia mundial. Cablegate, como se bautizó una de las mayores filtraciones de documentos de la historia, pone en evidencia la gestión de la política exterior de EE UU, como el cambio en las relaciones con China y Corea del Norte y la orden de Washington de espiar al secretario general de la ONU, entonces Ban Ki-moon.
En paralelo a la publicación de los documentos, la Fiscalía sueca emite una orden de arresto contra Assange, acusado de violación por una mujer y de abusos por otra en ese país. El cofundador de Wikileaks niega los cargos. El segundo caso acaba archivado por prescripción, pero las autoridades suecas mantienen la investigación por violación hasta que el mismo Assange se entrega a la policía en Londres. Un tribunal le concede la libertad condicional bajo fianza.
2012
Asilo en la embajada de Ecuador
La Embajada de Ecuador en Londres concede asilo político a Assange tras aprobar un tribunal la extradición a Suecia por el caso de supuesta violación. La justicia británica ordena su detención por incumplir la libertad condicional cuando se refugió en la embajada. La policía instala una guardia las 24 horas para arrestarlo si sale.
2013
Condena a Manning
Mientras Assange sigue refugiado en la Embajada de Ecuador, Chelsea Manning, una exsoldada del ejército estadounidense y la principal fuente de Wikileaks para la filtración del Cablegate, es condenada a 35 años de prisión por violar la Ley de Espionaje. A los pocos meses del veredicto, Manning pide al entonces presidente de EE UU, Barack Obama, un indulto al justificar sus acciones por “un sentido del deber para con otros”. Obama conmuta su pena en 2017.
2017
Assange roza la libertad
Wikileaks hace pública la que califica de “mayor filtración de documentos de la historia de la CIA”, en la que se revela que la agencia supuestamente usa un método de ciberespionaje a través de los micrófonos de ordenadores, teléfonos y televisores para espiar a los usuarios.
Assange cumple un lustro como refugiado en la Embajada de Ecuador. En el mes de diciembre está a punto de abandonar las instalaciones gracias a un plan secreto con el que obtendría la nacionalidad ecuatoriana y un pasaporte diplomático para huir a través del Eurotúnel a algún país de la Europa continental. El plan se frustra en pocos días debido al espionaje de una empresa española que facilitó a la CIA esta información, según reveló en 2023 una investigación de EL PAÍS.
Mientras, la Fiscalía sueca archiva la investigación por violación y retira la orden de arresto internacional.
2018
Caso judicial en EE UU
Pese al fin del proceso judicial en Suecia ―que volvió a abrirse brevemente en 2019―, un tribunal británico rechaza un recurso de Assange y mantiene la orden de arresto en su contra por incumplir los términos de la libertad condicional.
En noviembre, un investigador descubre un expediente judicial sellado del Departamento de Justicia estadounidense que se hizo público por error y que parece revelar la existencia de un caso penal contra Assange. Se abre la puerta por primera vez a una posible extradición a EE UU si es arrestado por la policía británica.
2019
Arresto
El entonces presidente de Ecuador, Lenín Moreno, decide retirar el asilo diplomático a Assange, al que acusa de tener “una conducta agresiva”, de hacer “declaraciones descorteses y amenazantes de su organización aliada [Wikileaks] en contra de Ecuador” y de “transgredir los convenios internacionales” por su injerencia en asuntos internos de otros países. La policía británica entra a las instalaciones de la embajada ecuatoriana y lo arresta. Moreno justifica su decisión al llegar a un acuerdo con el Reino Unido de que Assange no sea extraditado a un país donde pueda enfrentarse a torturas o a la pena de muerte.
Un mes después de su detención, es condenado a 50 semanas de prisión por saltarse la libertad condicional. EE UU hace público el caso en su contra y lo acusa de 18 cargos, entre ellos espionaje y conspiración junto con Manning para hackear ordenadores del Pentágono.
2021
Avanza la petición de EE UU
Un tribunal británico dictamina que Assange no puede ser extraditado a EE UU, donde se enfrenta a penas de hasta 175 años de prisión, por el “elevado” riesgo de que se suicide si esto ocurre. “La salud mental del Sr. Assange se halla en tal estado que le resultaría angustioso ser extraditado. Sufriría un deterioro que lo llevaría a suicidarse, dada la determinación que le provocan sus trastornos autistas”, argumenta la jueza. Ante la decisión, la defensa del activista pide su libertad condicional, pero se le deniega por riesgo de fuga.
Los abogados de EE UU recurren la decisión y en segunda instancia, el Tribunal de Apelación de Londres revierte la sentencia y decide que hay garantías suficientes para que Assange sea tratado con humanidad una vez extraditado.
2022
Firma de la orden de extradición
El Supremo del Reino Unido desestima en marzo de 2022 un recurso de Assange y autoriza su extradición a EE UU. En julio, la entonces ministra británica del Interior, Priti Patel, firma la orden. La defensa del activista recurre la decisión, que queda en manos del Tribunal Superior de Justicia de Inglaterra y Gales
2024
Assange queda libre
El Tribunal Superior de Justicia de Inglaterra y Gales frena el 20 de mayo la extradición de Assange y le permite recurrirla ante los tribunales británicos, al considerar que Washington no proporciona las garantías suficientes para que el fundador de Wikileaks tenga un juicio justo en suelo estadounidense. El 25 de junio de 2024, el fundador de Wikileaks recupera la libertad tras declararse culpable de un cargo de violación de la Ley de Espionaje de EE UU. Con ese acuerdo con el Departamento de Estado, que debe ser ratificado este miércoles, se pone fin a su largo culebrón legal. “Julian Assange está libre”, ha tuiteado Wikileaks.