Por Óscar Domínguez G.
Me permito informar urbi et orbi que una tal Cotela, también llamada Andrea, cumple años hoy. Es un regalo de Dios, de todos los dioses, para el caso de que “haiga” ateos en la tribu Domínguez Duque.
Sé cuantos años cumple mi brillante colega periodista pero me los callo. En todo caso, son los suficientes para haber hecho las cosas bien para su entorno, empezando por sus taitas que vivimos orgullosos y felices de darle semejante bocado de cardenal a la humanidad.
Modestia, apártate, pero nos lucimos al darle mamá a Sofía Mo y a Ilona Lu, y mujer al gringo Joshua Dean, hombre fuerte de Cleveland. Me declaro presidente perpetuo de la primera línea de sus fans. No me dejo derrocar de esa presidencia.
Me abstengo de agregar otros adjetivos porque me declara lagarto. Pero qué felicidad saber que tenemos Cotela para rato. En la foto de mi amigo Daniel Jiménez, de Colprensa, mamá y papá sonreímos felices, chorreamos la baba, ante semejante bogotanísima damita. Se te ama, Cote, tu taita.