Estamos viviendo una transformación significativa en el alcance y la escala del gobierno federal. El Departamento de Eficiencia Gubernamental de Elon Musk ha facilitado recortes drásticos de personal y contratos en todas las agencias federales. Se toman y deshacen decisiones con tal velocidad que puede ser difícil comprender la totalidad de lo que está sucediendo y cuáles serán las consecuencias. Pero ProPublica está decidida a brindar transparencia y rendición de cuentas a un proceso que parece intencionadamente oscuro.
La semana pasada, ProPublica obtuvo la grabación de una reunión a puerta cerrada en la Administración del Seguro Social, que ofrece a los lectores una perspectiva extraordinaria de cómo es realmente trabajar para las agencias federales a medida que sus puestos se vuelven cada vez más precarios. Durante la reunión, el comisionado interino del Seguro Social, Leland Dudek, hizo declaraciones alarmantes sobre los peligros que enfrenta el sistema, pero lo hizo de una manera extrañamente informal y discursiva. Esto dejó a varios participantes desconcertados sobre el destino final del programa social más grande y popular del país, uno que beneficia a 73 millones de estadounidenses. «¿Vamos a romper algo?» Dudek preguntó en un momento dado, refiriéndose a lo que DOGE ha estado haciendo con los datos del Seguro Social. «No lo sé», respondió.
La grabación ofrece una perspectiva notablemente sincera del pensamiento de un alto funcionario de la agencia en los volátiles primeros días del segundo gobierno de Trump, y revela hasta qué punto «los chicos de DOGE», como los llama Dudek, y la Casa Blanca están tomando las riendas del Seguro Social. En la reunión, Dudek presentó las decisiones que ha estado tomando en las últimas semanas como la agenda «del presidente», incluyendo los recortes previstos de al menos 7,000 empleados del Seguro Social; indemnizaciones y ofertas de jubilación anticipada; recortes en los servicios de determinación de discapacidad; la disolución de un equipo que había estado trabajando para mejorar la experiencia del usuario en el sitio web ssa.gov y el proceso de solicitud; la reducción de la presencia de la agencia en todo el país de 10 oficinas regionales a cuatro; la rescisión de 64 contratos de arrendamiento, incluyendo los de algunas oficinas locales y oficinas de audiencias; propuestas para externalizar el servicio al cliente del Seguro Social; y más. Los despidos, y el espectro inminente de que potencialmente miles de empleados más acepten una indemnización por despido, han significado que se esté prestando aún menos atención a los complicados casos de las personas mayores de bajos ingresos y de las personas con discapacidades físicas e intelectuales, como ha informado ProPublica.
Mientras tanto, nuestro reportero también se enteró de que DOGE ha socavado la eficiencia de la prestación de servicios del Seguro Social de múltiples maneras. Un ejemplo: los sistemas tecnológicos parecen colapsar casi a diario después de que DOGE cancelara o redujera varios contratos de TI del Seguro Social, lo que provocó más retrasos. Esto ya era un problema, según los empleados, pero ha empeorado mucho y ya no es la norma.
Dudek afirmó en la reunión que sería catastrófico para la gente de nuestro país si DOGE implementara cambios en su agencia tan radicales como los de USAID, el Departamento del Tesoro y otros. Cuando un participante le preguntó por qué no denunciaba con mayor firmeza las continuas afirmaciones falsas del presidente Donald Trump sobre el fraude generalizado al Seguro Social como «mentiras», Dudek respondió: «Publicamos, para que conste, las cifras reales que aparecen en nuestro sitio web. Esto se refiere a… ¿Ha trabajado alguna vez con alguien con trastorno maníaco-depresivo?».
Los portavoces de Dudek, la Administración del Seguro Social, la Casa Blanca y Elon Musk no respondieron a las solicitudes de comentarios.
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