Colombia necesita una reforma pensional justa y equitativa: CAXDAC

La vejez digna que reclaman los colombianos

Por Germán Nuñez

Si hay reforma, deben resolverse los problemas y no originar un nuevo gran inconveniente como pudiera ser que los recursos que van a ir al Estado, no se administren con el debido cuidado.

El sistema de pensiones como se ha recalcado en este medio tiene sus raíces en la famosa tontina, un invento del banquero italiano Lorenzo de Tonti que lo lanzó en el siglo XVII. La idea del financista llegó a oídos del cardenal Mazarino y allí tuvo eco el elemento fundamental que permitió recaudar recursos que fueron destinados a la reparación económica que se fue al piso luego de la guerra de los treinta años.

El mecanismo fue bastante llamativo porque varias se reunían para hacer los respectivos aportes que eran inmediatamente invertidos, gracias a la fecha de vencimiento, los capitalistas que sobrevivían al corte recibían dividendos y cuando uno de los socios partía al sueño eterno, su aportación era ecuánimemente dividida y repartida entre los afortunados que aún seguían con la fortuna de respirar. El asunto era retador y de alguna manera tétrica puesto que el método aplicaba de manera recurrente hasta que la última persona viva se hacía con la totalidad del capital.

Si todos fallecían, los fondos iban a las arcas del Estado que lo utilizaba en el desarrollo de obras públicas.

Por lo general los integrantes de la tontina debían tener edades afines para garantizar equidad, de un momento a otro los aportes crecieron exponencialmente y lo que parecía muy bueno terminó en la muerte programada o asesinato de algunos ahorradores. Al igual que la prostitución, la corrupción es añeja y la tontina entró en ese derrotero pues los médicos eran remunerados por los inversionistas para escoger las familias con más edad para matricularlas en el sistema de ahorro

Entre estafas, corrupción y asesinatos sucumbió la tontina que fue prohibida, pero los historiadores dicen que el método contribuyó con las primeras bases de datos en cuanto a mortalidad, algo determinante porque fue el primer paso para registrar a las personas fallecidas.

La tontina ayudó a financiar obras de carácter estatal, guerras y otras soluciones de verdadero desarrollo. En 1794 se socializa la Tontine Coffee House, un sitio ideal para las reuniones de agentes de seguros, corredores de bolsa, negociantes, capitalistas minoristas y políticos, ese negocio antecedió a la hoy pujante Bolsa de Nueva York.

Como se sabe, las pensiones han pasado por todo tipo de transiciones, arrancaron con anécdotas y luto, pero fueron dándole forma a un sistema universal que sirvió para cubrir a los jubilados que recuerdan a Alemania como cuna del seguro social para atender la vejez. Este programa fue obra del estadista y canciller Otto von Bismarck.

Hay que recordar que al hacerse la combinación ente el programa de indemnización a los trabajadores en 1884 con el seguro de enfermedad decretado un año antes. El seguro unificado les dio a los alemanes un sistema de seguridad inmejorable en la época en donde los ingresos fueron el gran respaldo y al final del día los sólidos inicios de la seguridad social.

Bismarck fue un hombre de credo conservador, pero por sus iniciativas fue tildado de socialista. Paradójicamente la misma experiencia experimento 70 años luego el presidente Roosevelt, después en 1935 el gobierno de los Estados Unidos le dio su bendición a la Ley de Seguridad Social, que adoptó un término adicional, seguridad económica con seguro social.

En Colombia las pensiones surgen en 1945 una vez se aprueba la Ley 1600 que le da vida a la Caja de previsión Social de los Empleados y Obreros Nacionales. Después la Ley 90 de 1946 erige el Instituto Colombiano de Seguros Sociales con lo cual llevó servicios de seguridad social expresados en salud a los trabajadores del sector privado. Amén de todo, el Instituto fue inaugurado de manera oficial el 19 de junio de 1948, meses después en 1949 la entidad prestó servicios para enfermedades no profesionales y maternidad.

Hablar de pensiones resulta entre divertido y complejo, son muchos los movimientos, cambios y las dependencias pues el país creció, el modelo económico destruyó empleos por impulsar importaciones y con ello avinagró la opción de jubilación. En 1993 se presenta al país la Ley 100 o de Seguridad Social que crea las Entidades Promotoras de Salud, EPS, los fondos privados de pensiones y otras opciones para elegir der manera independiente la seguridad social. Con el tiempo de identificaron errores, las EPS fueron cerrando y quebrando como un castillo de naipes, incumplieron con clínicas y hospitales que hoy padecen una deuda gigante tazada en muchos billones de pesos.

Hoy el tema sigue candente, el Gobierno presentó una reforma, pero el sector empresarial y muchos que cuentan con ciertos beneficios se opusieron a la iniciativa, de todas maneras se habla y se trata de concertar una reforma justa, equitativa y coherente porque en Colombia muchos se pensionan con demasiados millones en tanto las clases trabajadoras, otrora estrato medio y los obreros de la clase baja, logran pensionarse con algunas moronas, otros se quedaron sin ese derecho luego de permanecer toda una vida en el campo o por falta de oportunidad, otra mayoría no lo logró por falta de disciplina.

En charla con Diariolaeconomia.com, el presidente de la Caja de Auxilios y Prestaciones de ACDAC, CAXDAC, Daniel Niño, aseguró que si Colombia no logra un consenso para sacar adelante una reforma pensional consecuente, equitativa y justa vendrán momentos complicados porque el país está ante una coyuntura social difícil porque hay tres situaciones que no son buenas, la primera inquieta porque las personas de más altos y mejores ingresos se pensionan en Colpensiones y para pensionarse allí recibiendo unas mesadas sumamente elevadas, los beneficiados de esta elite terminan siendo subsidiados por el Estado lo cual no es coherente porque las personas más acomodadas y con mejores beneficios en la sociedad reciban tantos favores estatales cuando hay además tremendos niveles de desigualdad, algo que no se corrige en el caso de que no hubiese reforma, algo que realmente no debería ser tolerable por los nacionales, aspecto tan delicado que por sí misma lleva a pensar que sí se necesita una reforma pensando en el país y en su gente.

La segunda situación tiene que ver con que más o menos el 60 por ciento que tiene un ingreso no aporta a pensión y eso invita a hacer una reforma que si bien no es pensional, debería hacerse alrededor de objetivos pensionales y de seguridad social porque en efecto es también parte de lo que tiene al sistema de salud en graves problemas pues hay un mercado sin ingresos familiares en donde la gran mayoría es informal, contexto que demanda un gran esfuerzo como país por hacer una gran reforma laboral que mejore la formalidad o que por lo menos no se siga excluyendo de la formalidad a las personas que no ganan un salario mínimo y por eso en ese frente igualmente es válido ver un aporte positivo de la reforma pensional.

El tercero de los elementos que seguramente hay que corregir, precisó Daniel Niño, es que dentro de la gente que tiene un trabajo formal en donde más del 80 por ciento gana menos de tres salarios mínimos, habría necesidad de formularse si esa gente debería estar en un fondo privado porque la gran mayoría de ese 80 por ciento si no todo, sencillamente no se va a pensionar porque tuvo un ahorro y una rentabilidad que no representa una carga para el Estado sino que por el contrario terminarán pensionándose, pero siempre y cuando el aparato estatal les complete un monto para que por lo menos la pensión sea un salario mínimo y entonces la pregunta que surge es si el sistema que se tiene hoy de ahorro individual, precisamente es el que debe tener un país como Colombia en vista que más del 80 por ciento de las personas ni siquiera alcanzan en su vida devengando tres salarios de Ley, no logran un nivel de ahorro y de cotizaciones que dé precisamente para que la pensión sea un estipendio básico, pero sin necesidad de que sea soportado por el Estado.

“Creo que esos tres problemas sí dicen algo, que si no se hace nada habrá complicaciones de todo tipo porque Colombia tiene como en su parte fiscal, un serio déficit, hueco y brecha social por esas razones, demasiadas personas de altos ingresos se terminan financiando con cargo al presupuesto general de la nación que usualmente se cubre con deuda, afectando con pasivos a jóvenes y a los colombianos del futuro. Insisto en que es apremiante meter en cintura la informalidad para que esos ciudadanos que están en la otra orilla entren sin demora a hacer parte de un concepto de formalidad para que puedan cotizar”, puntualizó el presidente de Caxdac.

No menos importante es tener en cuenta que un grupo importante técnicamente no se pensionará por su ahorro, sino que necesitará algún tipo de ayuda del Estado, y la pregunta recurrente es si esos colombianos deben estar en los fondos privados. Si no hay reforma, sentenció Daniel Niño, habrá más de lo mismo con un agravante, seguirá ganando volumen un inmenso problema, de otro lado, si hay reforma, conceptuó, deben resolverse esos tres problemas y no originar un nuevo gran inconveniente como pudiera ser que los recursos que van a ir al Estado, no se administren con el debido cuidado, con la mayor transparencia, con enorme independencia o pasando por alto la protección y el blindaje que esto exige para que no terminen malgastados, eventualmente en tantos procesos que el país hoy experimenta donde la gente se apropia de lo público.

Subrayó que, al hacer reforma, esa es una de las cosas que el país debe cuidar, preservar recursos para el bienestar y dejar de lado las prácticas corruptas.

El presidente de Caxdac conceptuó que desde hace mucho tiempo el país es consciente que se requiere una reforma pensional y en ese orden de ideas, al final del día en muchos casos no se han querido tomar los riesgos y asumir el desgaste político que la situación demanda de cara a renovar el sistema de jubilación.

Aseguró que las preocupaciones principales surgen porque eventualmente, según algunos analistas, eventualmente con la reforma pensional al gobierno le llegará un flujo de dinero que podría terminar malgastado y por eso desde esa perspectiva ha habido mucha inquietud y preocupación. Por otro lado, precisó, existe la inquietud de que al pasar un porcentaje muy importante de afiliados a Colpensiones se pueda poner en riesgo la continuidad o sostenibilidad de largo plazo en los fondos privados.

“Yo creo que desde esa perspectiva hay muchos matices o elementos para analizar porque evidentemente lo que sí es claro es que en el mundo en general, los sistemas públicos se vienen discutiendo desde hace ya varias décadas porque según algunos, no pueden ser la fuente principal o única de pensión de la población en ocasión al envejecimiento de la misma, lo que se llama sistemas de repagos. Por otro lado, creo que demasiada gente está muy preocupada, precisamente porque en estos 30 años, un tiempo considerable, tenemos una situación de las personas de los fondos privados donde las pensiones son muy bajas y desde ese punto de vista, hay gente muy inquieta porque la reforma, sobre a todo a las personas más jóvenes, las obliga prácticamente a que generen más de tres salarios mínimos para pensionarse en el sistema privado y creo que ahí también hay preocupación”, anotó Daniel Niño.

El directivo añadió que en el trasfondo hay un tema el cual resulta claro y es, que en un país donde un porcentaje muy alto, casi el 60 por ciento del empleo es informal, donde el 80 por ciento del empleo formal puede ganar menos de tres salarios mínimos, pues en esa coyuntura hay la preocupación en el sentido si la reforma es la que le conviene o no a la nación, si es aplicable o en definitiva inviable y viéndolo desde ese panorama, expresó, se han acumulado buen número de inquietudes así como dudas.

La revisión que tiene Caxdac, de alguna u otra forma le dice a la caja que hay cosas importantes que se tratan en la reforma como por ejemplo que las pensiones de más altos ingresos no terminen subsidiadas por el Estado, aseveró que son visibles en el proyecto temas razonables como pensar que eventualmente esa población que en un 80 por ciento devenga igual o menos a tres salarios mínimos, difícilmente justificarán su pensión en los fondos privados.

Agregó que es bastante sensato y razonable pensar al ver el proyecto de ley, que un sistema público en el largo plazo será insostenible por el envejecimiento de la población, es decir que para el conocedor la reforma no es mala sin que no se reconozca que está llamada a pasar por algunos ajustes e igualmente a puntualizar en algunos aspectos.

El presidente de Caxdac detalló que se ha visto con preocupación que la reforma en lo atinente al velar contributivo para las personas de más tres salarios mínimos, no se plantea mayores análisis habida cuenta que actualmente hay en Colombia para ese grupo de personas relativamente pequeño en la población, pero muy importante porque es el que más ingresos genera y mayor capacidad de ahorro tiene, que la iniciativa de alguna u otra manera atienda los problemas que ese público va a tener en efecto para mantener y depender en gran medida de una pensión en los fondos privados.

“Hay muchas preocupaciones, no todas coinciden, no todas son sobre lo mismo, pero si existe un número elevado de inquietudes de cómo funciona hoy el sistema, de sobre si la reforma resuelve los problemas que hoy tiene el régimen. Creo que la reflexión nuestra es que hay cosas bastante buenas que en el proyecto de reforma pensional son notorios aspectos muy sensatos así no sean los mejores, pero igual decimos que hay otros puntos que deben mejorarse como garantizar un muy buen gobierno, el manejo independiente y transparente del ahorro que va a llegar al sistema público. He dicho que debe considerarse que, para las personas entre uno y tres salarios mínimos, no debería haber comisión de administración en razón a que esas personas precisamente son las que mayor dificultad tienen para pensionarse, aunque estén en la formalidad”, declaró el señor Daniel Niño.

Del mismo modo, el presidente de Caxdac señaló que desde la caja se ha dicho que también es bastante importante al igual que una manera de mejorar, el que los fondos privados funcionen para las personas de más de tres salarios mínimos. La reforma en consecuencia, acentuó, debe optimizar el esquema y una de las vías apropiadas para hacerlo es justamente corregir considerablemente el modelo privado con el fin de que los afiliados perciban que tiene sentido ahorrar, haciendo un gran esfuerzo a lo largo de su vida, como quien dice, crear un nivel básico de pensión que lo debe dar el sistema público y para quienes tengan mejores ingresos un régimen de pensión, producto del esquema privado de cuentas de ahorro, pero con un bosquejo donde en las nombradas cajas, los titulares tengan como consumidores o clientes, mucho más margen y el poder recibir más rendición de cuentas, más alternativas y mayor competencia en los fondos privados para que en caso de que a los afiliados no les guste algo se puedan cambiar de administradora sin ningún tipo de condición o amarre.

También tener el poder de saber hasta dónde hacer de todos modos algo de ahorro, un tema puntual de la calculadora de Caxdac, para poder obtener una pensión lo más digna posible para reemplazar el nivel de ingresos que como personas los afiliados han tenido a lo largo de su vida.

Cabe recordar que en tiempos anteriores en Colombia las familias tenían 12 o más hijos y esa descendencia pagaba las pensiones de sus padres en el sentido de que después de recibir educación, alimento, vestido, formación y poder salir adelante, un rubro que costaba mucha plata, pero con el tiempo y para fortuna de los progenitores, esos hijos posteriormente contribuyendo de una u otra forma al Estado y al sistema pensionaban a los mayores. Hoy existen escenarios extremos en donde hay núcleos o matrimonios que no tienen hijos evitando los gastos que hicieron los papás de hace unas décadas.

En opinión de Niño, en esos hogares lo ideal es alcanzar un ahorro importante para que la vejez tenga una mejor posibilidad económica que garantice sosiego y calidad de vida financiada con el peculio acumulado. De otro lado en la mitad hay familias que no tienen la docena de hijos, pero igual sí tienen descendencia, eventualmente dos o tres hijos y en ese esquema explicó el experto, es muy difícil pensionarse como se jubilaban las personas anteriormente con muchos más niños. Tampoco pueden tener el mismo nivel de ahorro de quienes no concibieron y allí es donde se justifica el nivel básico de pensión.

Fondos privados deben considerar cambios

Al entrar en el asunto de los fondos privados de pensiones el presidente de Caxdac Daniel Niño apuntó que sin duda están llamados a repensarse porque un esquema de pensiones sin los fondos privados en el mundo hoy en día no es posible, es decir un programa de cuentas individuales donde la gente pueda poner sus ingresos, salarios y ahorros, sin ese modelo el globo no es viable, pero señaló que como ha funcionado el sistema en los últimos 30 años en Colombia, genera ese tipo de preocupaciones porque indudablemente deben mejorar para que calen en la confianza de los ahorradores.

Especificó que como pasa en todo, la Ley 100 nació con sus defectos ya que si se mira en términos comparativos con otros países donde el régimen existió y que no es América Latina sino el propio Estados Unidos y Europa, la ordenanza llegó con varias fallas, el primero, dijo Niño, tiene que ver con la cantidad de barreras puestas a la entrada no solo en Colombia sino en Chile o Perú, por citar un ejemplo porque el modelo generó muy poca competencia, la ley fue alumbrada con defectos, agregó, porque entre otras cosas, si bien se le dijo a gente que el esquema era importante por ser de ahorro individual en donde el sujeto tiene atesorada su plata, precisamente no se le dio el suficiente poder a la persona ni se les exigió a esos fondos el educar financieramente a sus afiliados.

“Fíjese que después de 30 años, en Colombia, mucha gente que está en los fondos privados no sabe qué tiene, cuánto debe tener y no hace un seguimiento juicioso al ahorro, por tal motivo ocurre que cuando un individuo se va a pensionar se sorprende porque nunca le fueron avisando con el debido tiempo ni con antelación el tipo de situación a la que se iba a enfrentar, sin tanta vuelta a una pensión muy baja. Creo que, en líneas generales, todo eso debería pensarse y mejorarse”, aseveró el versado.

Calculadora pensional, un instrumento versátil

Caxdac creo la calculadora pensional, un instrumento que le da la posibilidad al individuo para que entienda de qué depende su pensión que es lo que en principio las personas deben hacer en términos de jubilación para poder tener una buena mesada. Dicho de otra forma, la Caja de Auxilios y prestaciones puso a disposición de los colombianos una calculadora pensional de ahorro individual que permite bajo el actual proyecto de reforma pensional, representar escenarios de pensión en el futuro.

El presidente de Caxdac explicó que con la nueva herramienta la gente puede entender qué tan importante renta el dinero en la discusión de si la plata le va a alcanzar al pensionado o para qué le va alcanzar, en segunda medida la calculadora permite entender cómo en función de cuántos años espera el afiliado vivir después de empezar a disfrutar el merecido derecho y cómo afecta ese monto de ahorro generado.

La calculadora, señaló Daniel Niño, permite entender cómo afecta o si no afecta el ahorro pensional las comisiones que le cobran a ese capital o reserva y luego facilita comprender qué papel juega el hacer un ahorro adicional como tesoro voluntario para lograr el tipo de pensión que se desea tener.

“Creo que por esas razones se da ese elemento que estoy seguro, es muy importante de la calculadora porque la herramienta ayuda de manera trascendental a las personas a hacerse las preguntas y a encontrar las respuestas requeridas y precisamente nosotros la creamos porque queremos empoderar a la gente, anhelamos que de una u otra forma el usuario encuentre a través del instrumento facilitado diversos asuntos que lo lleven a sentarse con su fondo para plantear mejor rentabilidad, mayores rendimientos de la plata y asegurar un negocio por la vía del ahorro.

Con la calculadora, manifestó Daniel Niño, los colombianos lograrán concluir si, con el ahorro que tienen actualmente, más lo que continuarán aportando hasta cumplir las semanas laborales y la edad de jubilación, alcanzarán el nivel de pensión que esperan, o si caso contrario tendrían que hacer un esfuerzo adicional en su nivel de aportes en el pilar de ahorro voluntario, o buscar con su fondo de pensión, una rentabilidad superior sobre los ahorros reportados, de tal manera que le permita al afiliado hacerse a una mesada idónea para una vejez digna.

A juicio del presidente de Caxdac, uno de los elementos más importantes de esa herramienta es que ayuda en todos los frentes de la pensión, tiene, dijo, una virtud grande e importante de ayudarle a la gente a despejar dudas e inquietudes, algo vital porque fortalecen mucho al consumidor a la hora de exigir rendición de cuentas al gestor o persona que le maneja el ahorro, algo muy importante en el proceso.

A la calculadora no solo tienen acceso los pilotos o aviadores civiles, todos los interesados del sector que sea tienen la facilidad de hacer uso de este instrumento lo cual es muy fácil porque con solo entrar a la página de Caxdac, los futuros pensionados en efecto van a tener plena vía para ver la herramienta y explorar la forma en la que les resulta más funcional, todo ingresando al link https://www.caxdac.com/seccion/calculadoraweb.html.

Los interesados, indicó, podrán simular y hacer todo el ejercicio para determinar el devenir de sus pensiones.

Sobre Revista Corrientes 4606 artículos
Directores Orlando Cadavid Correa (Q.E.P.D.) y William Giraldo Ceballos. Exprese sus opiniones o comentarios a través del correo: [email protected]